El proceso de Orientación Vocacional logra la definición de la identidad laboral, la cual permitirá a la persona, estar en armonía con sus propios deseos y aptitudes.

La Grafología ayuda a definir si la persona está en condiciones de afrontar la carrera que surja del proceso de Orientación Vocacional, y a la vez da herramientas para modificar las áreas que pudiesen interferir en el estudio de la misma, a través de la grafoterapia.

El proceso de Orientación Vocacional se realiza en cinco sesiones aproximadamente, y se administran tests grafológicos y psicológicos, con los cuales se alcanzan excelentes resultados.

Hay tres momentos claves para acceder a una Orientación Vocacional: al terminar la escuela primaria, al terminar la escuela secundaria, y en aquellos momentos de duda en los que las personas se sienten incapaces de definir la carrera a elegir.

En cada sesión se administran alternando, tests proyectivos gráficos, tests grafológicos y de Orientación Vocacional.  

El trabajo es arduo, los tests son muy profundos, pero los resultados son exitosos. Además de determinar el área más calificada para la persona, la elección se hace entre tres carreras como máximo.